Esta semana os muestro un piso madrileño reformado, situado en la zona de Malasaña.
Pequeño piso compuesto por un gran salón con 4 ambientes, cocina, habitación y baño. El objetivo de la reforma era eliminar la entructura súper compartimentada de este piso y crear un ambiente más ligero, abierto y luminoso, para ello se unieron diferentes zonas por medio de vanos sin puerta, los pilares de madera eran los encargados de crear una línea de continuidad que fueron junto con las contraventanas los 2 elementos que sobrevieron a la reforma.
El propietario ha sido quien ha decorado su propio piso y por las fotos que os muestro a continuación veréis que no se le da nada mal. Se observa una mezcla brutal de estilos en el mobiliario, conviven en perfecta armonía muebles de oficina antiguos, piezas de diseño, lámparas vintage y muebles encontrados en mercadillos…
De todas formas creo que es mejor que lo veáis por vosotros mismos… pasen y vean…
La puerta azul en la entrada ya nos avisa de que nos hallamos ante un piso diferente… nos reciben un mapa antiguo y un banco de madera.
El salón abierto y luminoso se divide en 4 espacios, zona de estar, zona de trabajo con mesa de oficio y librería, zona de relax para leer o escuchar música y comedor. En todas las estancias vemos cómo conviven el metal y la madera, ambos materiales se entienden muy bien, están presentes en la mesa de trabajo o la mesa de centro creada con un palet y unas ruedas metálicas.
En un extremo del salón, encontramos que se ha utilizado un pequeño espacio para poner el comedor que se comunica con la cocina por medio de 2 pasaplatos que también se utilizan como estantería para dejar la vajilla.
La cocina mantiene la línea y mezcla sin pudor maderas, vidrio, metal, elementos vintage y objetos de mercadillo… todo conjugado con muy buen gusto.
Pasamos a otra zona, vamos hacia la habitación y el baño, ambos están unidos, son estancias luminosas y en ellas predomina el blanco mezclado con elementos de color y obras de arte, como en el resto de la casa. Las piezas estrella y las encargadas de darle un toque distinto al dormitorio son el archivador verde que hace de mesilla y el mueble de dentista en color crema de los años 40.
Junto a la habitación encontramos el baño de la casa que es multifunción, vestidor y cuarto de baño.
No quería acabar sin mencionar el suelo, ¿os habéis fijado? nada de baldosas, nada de parquet… parece cemento pulido, material que en principio podría parecer un poco frio y sin embargo mirad lo bien que combina y lo cálido que queda en este piso madrileño.
Todas las fotos las he encontrado en Nuevo Estilo, si algunas de las piezas os han interesado, en el reportaje de la revista encontraréis el listado de direcciones. Mis piezas preferidas son el archivador verde de Otranto y el kilim del baño de Berberia del Sahara y El Sahel
¿A que os ha encantado la casa? a mi me ha parecido preciosa y súper acogedora.
Via: Revista online Nuevo Estilo